Jorge Rojas pasa el verano entre breves giras y el estudio de grabación.
Esta noche abre la séptima luna del Festival de Cosquín.
Se le nota cierto orgullo a Jorge Rojas cuando señala el viejo algarrobo que está en la puerta de su estudio de grabación. Meticuloso, explica que si uno camina por el sendero que viene de su casa hacia el estudio, se produce un efecto visual: a medida que uno avanza, es como si la copa del añoso árbol se fuera abriendo para de a poco dejar ver la puerta principal. Dice que le gusta esa sensación que de sea el árbol el que te presenta el estudio. Sentado bajo esa sombra bienechora, en la tarde de Anisacate, después de su esperado regreso a Jesús María y antes de su llegada a Cosquín, Rojas conversa con VOS.
Esta Noche, el cantor será protagonista, nuevamente, en la Próspero Molina, el escenario que lo consagró en 2006, cuando recién separado de Los Nocheros lanzaba su carrera solista. Fue cuando definitivamente pasó a ocupar un lugar privilegiado entre los más queridos por el público.
Rojas actuará en Cosquín con una banda renovada respecto a la del año pasado, junto a sus hermanos Lucio y Alfredo en coros, Christian Banegas en bajo, Antonio "Clavo" Riera Marcelo Cáreces en guitarra, Mauricio Griotti en piano, Manuel Sija en violín y Horacio "Achi" Bevilaqua en batería y percusión. "Este año preferí acomodar bien las presentaciones. Elijo los lugares a los que voy a actuar con la banda, de manera de hacer un promedio de dos presentaciones por semana; alguna vez tres, pero no más", señala y agrega: "Antes de salir hubo que poner a punto la banda, integrar a los nuevos músicos para que den lo máximo, pulir los arreglos para adaptarlos al nuevo formato. De eso se encargó el "Mono" Banegas, que es un musicazo".
-¿Fue complicado renovar la banda y mantener esencialmente el mismo sonido?
No, para nada, salió de manera natural. Porfque los que llegaron son músicos excelentes, con mucha experiencia. Nos encerramos tres días acá en casa y dejamos todo a punto para salir. Después lo fuimos rodando en varias presentaciones. Todo está listo, hermano, para que en Cosquín nos mostremos al máximo. No veo la hora de que llegue el momento
-¿Por qué elegiste hacer menos presentaciones, justo en el verano, que es la época en que más se trabaja?
-Porque quiero tener el tiempo para dedicarme a trabajar en mi próximo disco. Salimos a tocar los fines de semana, pero el resto de los días los pasamos acá, grabando el disco. Para eso hice un estudio de grabación en casa, con instalaciones para recibir y hospedar a los músicos. Quiero tener todo cerca, hacer de este lugar mi mundo.
Rojas habla del nuevo disco que está preparando, del que ya lanzó una muestra con tres temas, entre ellos uyna versión de La llave, de Abel Pintos, y el propio Uno mismo, que es el tema que dará nombre al disco. "¿A que punto estoy de la grabación? Vení". De la sombra del algarrobo la charla se mueve al interior del estudio, donde Obi Homer, encargado de la producción y los arreglos de gran parte de los temas, se prepara para poner una guitarras y el violinista Manuel Sija está terminando con la percusión de un arreglo suyo, una especie de vallenato que por momentos se cruza con saya. "El trabajo rítmico de este disco presenta algunas novedades -explica Rojas-. Hay matices latinoamericanos y usamos los patrones rítmicos del folklore, pero no las estructuras.Es decir, tenemos ritmos de chacareras o de saya, pero sin respetar las estructuras tradicionales al pie de la letra".
Se hizo de noche, la jornada de trabajo en el estudio concluye, pero Rojas sigue sentado en la consola. "Escuchemos como va el disco, va ser más claro para vos que lo que yo te pueda decir", indica. Empiezan a pasar algunos de los 14 temas, ritmos variados, texturas diferentes y si bien se trata de un material todavía sin terminar, es evidente que en el sonido hay búsquedas que tienen que ver con cierto gesto pop y un amplio empleo de cuerdas. "Las cuerdas son naturales y fueron arregladas y grabadas por Obi. Necesitaba ese sonido para algunas de mis canciones", explica y agrega: "Seleccionamos 14 temas entre más de 20 y pienso que todo estará listo recién para febrero o marzo".
-¿De qué habla "Uno mismo"?
_De todo lo que nos permite hablar una canción. Las canciones reflejan el momento que uno está viviendo, como individuo o como sociedad. Y eso marca las diferencias de las distintas etapas de una carrera, de un disco a otro. El concepto de un disco se arma a través de las canciones que lo componen, que a su vez tienen que ver con cómo nos miramos para adentro y cómo interpretamos el afuera. Cada disco es un aprendizaje y desde los errores se aprende. Gran parte de los temas son míos pero hay cosas de otros, como el que me mandó Abel Pintos, un tema que todavía no tiene título pero se podría llamar Por si volvieras. También hay una versión de Hoy, del peruano Gianmarco.
-¿Tenés fe en el disco como soporte para la difución de la música?
-El mundo cambia y hay que aceptar los cambios que nos propone la tecnología. No es posible pensar que hoy se venden discos como antes. Hoy la circulación de la música se produce a través de las redes sociales, de Internet y hay que estar atento a esos movimientos.
-En "Uno mismo" están las canciones y en "Una sola voz", junto a Lucio y Alfredo (Los Rojas) hay más folklórico ¿Cómo se llevan el baladista y el folklorista?
_Muy bien, claro. Las cosas están muy bien delimitadas y cada disco tiene su propio concepto. Con este disco nuevo me sentí un poco más liberado en buscar otro tipo de ideas, porque el folklore lo hice en el disco con Lucio y con Alfredo.Yo nací con el folklore y lo llevo en la sangre. Eso no impide otro viaje musical que me lleve a otros ritmos. Esa amplitud me permite cantar una baguala o meterme en otros ritmos americanos.
La charla se prolonga y en eso entra un colaborador de Rojas, afectuosamente llamado "El chileno", a decir que el asado está listo. En el quincho, en torno a la larga mesa esperan los hijos de Jorge, su madre, su hermano Lucio, sus sobrinos, algunos músicos y técnicos que se quedarán a grabar. Los afectos que delimitan su lugar en el mundo.
El cantor contado
El periodista Luis Digiano acanba de publicar Jorge Rojas, en nombre del amor, una biografía ilustrada del cantor, que además contiene las letras de sus canciones y testimonios de Mercedes Sosa, Chango Farías Gómez, Daniel Toro, Cacho Tirao, Carlos Torres Vila. "La verdad no caigo todavía con esto del libro. No se si lo merezco y la verdad es que nunca había pensado en algo así", dice Jorge Rojas y agrega: me emocionó el prólogo de Marcelo Simón y las palabras de Roberto Ternán. También hay muchas personalidades del folklore, que admiro, que son muy elogiosas. Ya te digo, todavía no caigo, pero me gusta
FUENTE: http://vos.lavoz.com.ar/
