La segunda temporada de Jorge Rojas en el Luxor de Carlos Paz largó con un show impecable, acompañado por una formación de cuerdas que realza el espectáculo. Estará todos los lunes de enero y febrero.
¿Puede un fan valorar equilibradamente el show de su ídolo? ¿Puede juzgar si el sonido es malo, si la banda no ha tenido suficiente ensayo o si hace demasiado calor en la sala? ¿Tiene un fan la capacidad de dejar de lado el amor por la estrella y hacer valer lo que pagó por la entrada al espectáculo?
Bien, todas esas preguntas no podrán ser respondidas si se refieren el debut de la segunda temporada de Jorge Rojas en la sala del teatro Luxor de Villa Carlos Paz, este lunes, sencillamente porque el show fue impecable.
El repertorio elegido, la puesta, la formación de cuerdas que acompañó todo el show, el clima de la sala, la organización, el horario de inicio (sólo 15 minutos más tarde de las 22, la hora anunciada), el vestuario, los bailarines… Y un detalle clave: el cantante lució feliz y relajado, se divirtió toda la noche junto a su equipo y con la gente.
Si un verano atrás, en el mismo lugar, habíamos criticado un par de cuestiones (en un espectáculo que de todos modos siempre es de gran calidad), en esta ocasión no queda más que destacar las virtudes de Rojas y su equipo para impactar en un público fiel y meloso, que no paró de disfrutar de un momento único.
Como detalle distintivo para esta temporada, Rojas eligió una lista de varios de sus clásicos, y se hizo acompañar toda la noche por el Ensamble de cuerdas de Alta Gracia, dirigido por Obi Homer (violines, violas, cello y contrabajo). Largó con Uno mismo y en distintos tramos utilizó la fórmula de cantar medias canciones, hasta el cierre (26 temas más tarde), cuando regresó por segunda vez, a dos horas y media del inicio. No faltaron Al borde del delirio, El último deseo de Navidad, Lágrimas negras, Un montón de estrellas y muchas más.
Sus hermanos Lucio y Alfredo, respetuosos del formato íntimo del Show, se contuvieron bastante y cedieron protagonismo a la figura indiscutida.
Quizás (y siempre hay algo, obviamente), algunos momentos de la puesta ya reclamen renovación, como el cuadro de malambo (del que Rojas no participó en esta ocasión) o la eterna secuencia en la que toda la banda debe “mover la colita” para el regocijo de las chicas.
Rojas estará los lunes de enero y febrero en el Luxor. Las entradas cuestan: Sectores B, C y Platea Alta, 450 pesos. Sectores A, D y laterales, 400 pesos. Pullman y fila 19, 350 pesos. Se pueden adquirir en la boletería del Luxor con Visa, Mastercard, Bancor y Naranja, y por Internet en Autoentrada.
FUENTE: http://www.diaadia.com.ar/
Bien, todas esas preguntas no podrán ser respondidas si se refieren el debut de la segunda temporada de Jorge Rojas en la sala del teatro Luxor de Villa Carlos Paz, este lunes, sencillamente porque el show fue impecable.
El repertorio elegido, la puesta, la formación de cuerdas que acompañó todo el show, el clima de la sala, la organización, el horario de inicio (sólo 15 minutos más tarde de las 22, la hora anunciada), el vestuario, los bailarines… Y un detalle clave: el cantante lució feliz y relajado, se divirtió toda la noche junto a su equipo y con la gente.
Si un verano atrás, en el mismo lugar, habíamos criticado un par de cuestiones (en un espectáculo que de todos modos siempre es de gran calidad), en esta ocasión no queda más que destacar las virtudes de Rojas y su equipo para impactar en un público fiel y meloso, que no paró de disfrutar de un momento único.
Como detalle distintivo para esta temporada, Rojas eligió una lista de varios de sus clásicos, y se hizo acompañar toda la noche por el Ensamble de cuerdas de Alta Gracia, dirigido por Obi Homer (violines, violas, cello y contrabajo). Largó con Uno mismo y en distintos tramos utilizó la fórmula de cantar medias canciones, hasta el cierre (26 temas más tarde), cuando regresó por segunda vez, a dos horas y media del inicio. No faltaron Al borde del delirio, El último deseo de Navidad, Lágrimas negras, Un montón de estrellas y muchas más.
Sus hermanos Lucio y Alfredo, respetuosos del formato íntimo del Show, se contuvieron bastante y cedieron protagonismo a la figura indiscutida.
Quizás (y siempre hay algo, obviamente), algunos momentos de la puesta ya reclamen renovación, como el cuadro de malambo (del que Rojas no participó en esta ocasión) o la eterna secuencia en la que toda la banda debe “mover la colita” para el regocijo de las chicas.
Rojas estará los lunes de enero y febrero en el Luxor. Las entradas cuestan: Sectores B, C y Platea Alta, 450 pesos. Sectores A, D y laterales, 400 pesos. Pullman y fila 19, 350 pesos. Se pueden adquirir en la boletería del Luxor con Visa, Mastercard, Bancor y Naranja, y por Internet en Autoentrada.
FUENTE: http://www.diaadia.com.ar/
