miércoles, 13 de mayo de 2015

Los Rojas - Bien criollitos y con esencia familiar

Con el título de “A mi pueblo” Jorge, Lucio y Alfredo Rojas se unieron en la agrupación Los Rojas, con producción y repertorio bien criollito, en el que la vestimenta del gaucho los representa.




En charla de Luis Digiano con Lucio, nos enteramos más sobre el proyecto que surge en paralelo a la carrera solista de Jorge.

“Nos llevó casi tres años este disco, y es el de corte más folklórico que tenemos los hermanos y es donde nosotros conjugamos nuestros valores, costumbres y creencias, y hasta la forma de vivir allá en el Chaco salteño”, nos cuenta.

“Dentro de todo lo que significa nuestra tierra hemos tratado de dejar asentadas las canciones que sentimos como propias. Alfredo canta una zamba de Argentino Luna, y ´La ví bajar por el río´, de don Horacio Guarany fue realmente emocionante porque la he cantado toda la vida. Era mi caballito de batalla. Cuando apareció este proyecto le dije a Jorge que quería cantarla porque me identifica desde siempre, no sólo las chacareras del Chaco salteño”.

El rol del productor lo tomó Jorge, “trabajo mucho en nuestra interpretación, en los arreglos, trató de explotar la manera en que podemos sentir cada tema”.

Cuando el repertorio comenzó a armarse mucho material quedó afuera y “las que fueron quedando son las que nos emocionan, como ´Para los ojos más bellos´, de Juan Carlos Carabajal y Onofre Paz… Cuando Jorge estaba en Los Nocheros o yo en Los Carabajal y todavía el Alfredo era muy chico estos eran los primeros temas que cantábamos a trío. Decidir grabarlos y dejarlos grabados nos llena de alegría”.

Cuando apareció “A mi pueblo”, de Fernando Quevedo, que da nombre al álbum, “se la cantábamos a gente conocida a cada uno le recordaba su paisaje, el ruido del río, es una descripción que hermana muchos pueblos del país”.

Otros títulos surgen en la charla, como el de Los Olimareños, “Junto al Jaguey” o “Amor de madre”, “es lo que uno siente por la vieja, y el Alfredo y el Jorge lo describen de una forma tan clara… Trato de no llorar cuando la cantamos”.

Cuando terminaron su actuación en Jesús María, alguien los paró y los encaró porque estaban vestidos de gaucho: “¿Vos entendés de esto?”. Tal vez “haya gente que no sabe de dónde venimos ni quiénes somos o quién es mi viejo”, razona Lucio: “Yo siento que estoy vestido de gala porque la verdad es uso la ropa de gaucho desde los cuatro años. Es un honor para nuestra familia y el respeto a lo que nuestros mayores nos enseñaron. A mi bisabuelo nunca lo vi con pantalón, siempre con bombacha”.

La diferencia con el compacto anterior es que “Cuando las canciones fueron surgiendo las consideramos desde un lugar que en el otro disco no habían tenido. Al Alfredito lo he escuchado miles de madrugadas entonar la “Zamba para decir adiós” y tener la libertad y el espacio de poder hacerla en este disco fue un regalo”.

Para reflejar quiénes son Los Rojas sólo hay que escuchar “Chaqueñamente”, como “Qué lindo es estar de vuelta” es lo “que es la casa, el patio… o ´Sinfonía silvestre´ de Onofre Paz y Juan Carlos Carabajal, que es como si la hubiéramos escrito nosotros. Para que te des una idea, hace un par de días que volví de lo de mi viejo y ¡hay una parte en esa canción que describe donde estuve parado! Tienen que ver con nuestras raíces, con nuestra forma de vivir, de ser, la esencia familiar, los consejos de nuestros ancestros”.

Para cerrar la producción, un día Lucio se apareció con Quevedo ante Jorge, a quien la familia le dice “cantor”. Y “Cantor de la noche entera” lo describe “y cuando la entona con la guitarra del Colo Vasconcelos te hace parar los pelos”.

El disco ha ido tomando fuerza más allá del show de los hermanos. El trabajo solidario que desempeñan en el Chaco salteño los tiene ocupado durante todo mayo con la Fiesta del Arte Nativo.

“Nos ha dado un aire renovado, con un bloque que dedicamos pura y exclusivamente al compacto en los recitales. Pero ya empezamos a trabajar en el nuevo de Jorge, con Alfredo escribiendo y los amigos de siempre ofreciendo canciones”.

Tras Los Carabajal, el trabajo con Jorge y la participación con Los Rojas, Lucio recuerda que “vos me conocés de chiquito, de cuando empezaba la carrera y me has dado consejos cuando empezaba profesionalmente. Siempre te voy a estar agradecido por eso. Gracias a Jorge y el Chaqueño empecé con Los Carabajal que fueron el pilar, de ellos aprendí mucho. Siempre me incentivaron. Estoy siempre buscando mi espacio, con mi personalidad, con mi forma de ser. Cuando Jorge me invita a ser parte de su historia pensé que a lo mejor me iba a pedir que cambiara. Yo estaba pasando un momento muy especial con Los Carabajal, con canciones que me identificaban, asentado vocalmente. Para ayudarme estuvieron Kali, con toda su energía, y Musha, que fueron tremendos en esta decisión.