Cerca de las 22.30, el cantante subió al escenario y el público explotó. Su voz acompañado de su actitud y su presencia aportaron para que los sanjuaninos aplaudieran, saltaran y ovacionaran al artista.La espera se tornaba larga. El público ya no aguantaba más. Jorge Rojas se hacía esperar. Hasta que salió al escenario y los sanjuaninos lo ovacionaron. Vestido con pantalón de gabardina, una camisa oscura y un pañuelo que le cubría la mitad del pecho, así enamoró a las damas de todas las edades.
Su melodía comenzó a sonar luego de que una pareja de malambistas hiciera lo suyo anticipando el repertorio. Rojas salió sonriente, de muy buen humor y dispuesto a comprarse hasta la última mirada del Estadio Aldo Cantoni. Entre canción y canción, posó para la foto y no dudó en tirar besos al público que sin pensarlo mucho, enloqueció. Jorge se las trajo. Fue furor una vez más en la provincia cumpleañera que festejó a lo grande sus 449º años.
La Pirán y Emilio, el toque emotivo de la noche
Claudia Pirán brilló otra vez en su casa. Pero esta vez hubo un toque distintivo que lo hizo especial. Es que la ahijada artística del ex nochero llegó con una sorpresa: un nuevo integrante de la banda, un bombista nuevo: su hijito Emilio.
El niño fue ternura e impresión. Provocó que el público aplaudiera de pie al son del bombo que tocaba. Mientras su madre era un solo mar de babas, llena de orgullo con el pecho firme y la mirada bien arriba. “Este es mi hijo”, dijo cuando lo presentó y es como que lo repetía cada momento cuando el pequeño dejaba perplejo al público con su talento. Una noche especial para la Pirán que puso el toque tierno a una fiesta que quedará en su retina.
Antes que esto se hiciera posible, Los Díaz Heredia y Nano Rodriguez, también hicieron vibrar las butacas del estadio con su música. Fue todo una fiesta. Fue la fiesta de San Juan.
FUENTE: http://www.sanjuan8.com
El niño fue ternura e impresión. Provocó que el público aplaudiera de pie al son del bombo que tocaba. Mientras su madre era un solo mar de babas, llena de orgullo con el pecho firme y la mirada bien arriba. “Este es mi hijo”, dijo cuando lo presentó y es como que lo repetía cada momento cuando el pequeño dejaba perplejo al público con su talento. Una noche especial para la Pirán que puso el toque tierno a una fiesta que quedará en su retina.
Antes que esto se hiciera posible, Los Díaz Heredia y Nano Rodriguez, también hicieron vibrar las butacas del estadio con su música. Fue todo una fiesta. Fue la fiesta de San Juan.
FUENTE: http://www.sanjuan8.com
